Colocar una almohada entre los muslos puede ayudarte a evitar que muevas las piernas durante la noche, manteniéndote en la posición correcta por más tiempo. ¿Cómo funciona? La almohada impide que las caderas roten mientras duermes, lo que ayuda a que el cuerpo se mantenga más estable y en una postura adecuada.